Memphis Mitzraim

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VERDAD

TOLERANCIA

GUlA

HER:. MAESTRO S

MASON

SEA

RITU AL P ARA LOS TRABAJOS DE 3ER. GRADO

SIMBÓLICO

DEL

REPÚBLICA

ARGENTINA

RITUAL DEL

Tercer Gr.'. en el Rito Ese.'. Ant..

PRIl\IERA

y Acep..

PARTE

DECORACION Los muros tapizados de colgaduras negras, salpicadas con Iágrimas blancas; y al centro de cada uno de los muros del Norte y Mediodía, pintada una calavera humana sobre tibias cruzada. Nueve luces se diatribuyen en tres grupos de tres, al Este, al Mediodía y al Occidente. En el medio del 'I'emp .. , sobre el piso, un ataud (que puede simularse en un paño negro). Los asistentes a la Ten.·. visten traje n egro , y us banda presentan la faz negra. Sobre el trono del M .'. Resp .. Maest.'. una calavera. El Comp.. reeipienri .-. se eIlCOIltraráen la Sala de ppas. '. perdidos. APERTURA El 1\Iuv Resp .'. 1\Iaest.·. da 3 golp.. piten los Verierabilisirnos 1 Q Y 2Q Vig .'.

de Mall .'. que re-

M.'. Resp.'. Maest .. -Venmo .. ler. Vig.·. aseguraos si el 'I'emp .'. está cubierto .y si son 1\IMaest.·. todos los que en él se encuentrn n. (E'] Ven mo .. se eerciora ). VeIl¡.·.Ler. Vig.· .-Muy Resp .'. Mae t .. , el 'I'emp .-. está cubierto y tod'os los presentes son M laest.', M. '. Resp.. Ma¡est.', - VV en.·. ~'ll\laest .. ; siendo también Maes-

-4los que se sientan en el 01' .. , declaro en nombre Jel D.. . . abierta la Cam .'. del Medio! Sentaos, y escuchad el balaustre de la última Ten .. de esta gr.'. tros

G .. A.'.

(Se Ice el bal ... ) Puede observarse. (Una vez aprobado. el Ter. Diac .. recoge lAS firmas de la' cinco Luces). Ven .. Maest .. de Cer.'.-\'ed si hay ;U-;Uaest .. hacerlos entrar como corresponde. (;-:;eejecutan palabras) : Ven.'.

Maest.·.-Yuestl·a

".

SI

visitantes.

para ha-

hub iere n v vis .. , les dir ijre Ia s sigui:>nt:'s

presencia

nos trae csper anxa ;; fortaQ~za en por vuestra míos, Antes de iniciar el procedimiento, por el cual concederemos el gr .. de Maest .'. al Cormp .. N .... como lo sancionást eis, ojo; concedo la palabra. para que os manifestéis 1'11 definitiva. la angustiosa

situación que uo.s apesadumbra. Gracias. consoladora y tan oportuna ayuda! Sentaos hh ..

(Luego S~ vota, aceptándose también los sufragios de los VVis .. ) El Tall.·. confirma su deci ión y vamos a conferir el tercer gr .. al Comp.'. N ... Ven.' . .Jr.. Exp .. , conducidle. i Silencio ;-' recigimien t o, V'Ven .. ~D[ae; intenciones, 'el carácter, los sentimientos ." las aspiraciones del neófito. En el grado de Cornpa ñero se recurre a la instrucción para ponerle en condiciones de conocerse, de ilustrarse y de adquirir, baio la. inmediata d ireceióu del -:\Ta.('st1'o.Ia ciencia e11 la teoría y en la práctica de su g"1"ado. Reune conocimientos tales el Compañero :\1asóri, que le prestan cierta habilidad para resolver las principales cuestione de orden físico .'" moral que puedan turbar su espir itu y ob ieurecer su razón, La esperamsa de una recompensa le enardece, ~. siente germinar en su ser ola' .emil las que ha producido la e nsefia nza rnasónica. Comprende la J1lece id'ad de ensanchar la esfera de su actividad, ~. a n h ela ';(>J:Maestro; pero estf' anhelo ju .tísimo cuando nace de una idea noble, cuando se aspira a contnibuir a f'1'¡;¡borar las obras perfectas de Ja Masoner-ía, conducirá al Compañero a la meta de sus aspit-aciones , cuando, por el contrario, sólo obedece al móvil de una valla ostentación, de sati .faeer ambicione repr-imidas -:.' veladas por la hipocresía, al Maestro toca juzgar ,\' decidir sobre tan pei-niciosas ideas, cer ra ndo para .iempre al Compeñero la Cámara del -:\1edio. En el grado de Mae tro se de arrolla el cuadro de las miseria' humanas, se estudia la causa que las produce y los medios de remediarias. El masón comprende entonces que tiene nece .ida d absoluta. df' ser bueno, va lcrnso ~. magnánimo. Y l' que además de la Ci'?llÓa SE' necesita la virtud para lograr la frater-nidad eutr-e los hornbres , observa que sin el sacrificio de las pasiones, no podrá reinar la libertad; inquiere, por último, que es indispensable combatir el vicio COl~ todas la,') cne rg ias de que disponga. destruir la ignorancia por

- 28medio de la educación y a1'1'ntre los demás Maestros. El -de Oeremonias cubre e-l féretro con el paño mortuorio, r io, IB'Ocurando no sel' visto por el recipiendario.

M,·.

ResP,.

Maest .. -Haced

sentar

al Compañero

N .....

-

M.'.

M.'.

60-

El 2\la estro de Ceremonias aproxima al sitio donde se halla el Compañero un banquito triangular, y el Experto 'hace sentar a éste, cuidando que no vuelva la cara hacia atrás. Resp .. Maest .. -La tranquilidad de vuestro semblante y la firmeza con que habéis atravesado por encima de la caja mortuoría en que se halla el cadáver de nuestro Gran Maestro, nos induce a creer en vuestra inocencia, y, por tanto, os vaya revelar todos los detalles del triste suceso que lamentamos. Prestad toda vuestra atención a mis palabras, porque de este simbólico relato habréis de deducir en su día las magníficas y sublimes enseñanzas que se desprenden de sus diversas interpretaciones. (Da un gol pe de mall . ., que repiten los Vigilantes, y continúa.) Resp .. Maest .. -Salomón, rey de Israel, queriendo elevar un Templo a la gloria del Supremo artífice del Universo, pidió al rey de Tiro, su amigo y aliado, que le enviara al más hábil arquitecto .: Este le mandó entonces a Hirám-Abí, celebrado por sus profundos conocimientos y altas vir tude , y considerado como el más sabio arquitecto de la antigüedad. Hirám-Abí se encargó inmediatamente de la dirección de las obras, coordinando todas sus partes con arte exquisito y. previsora prudencia, y levantándose al amanecer vigilaba por sí mismo todos los trabajos. Como el número de obreros era .inmenso, le fué preciso, para el mejor orden, y teniendo en cuenta los méritos y condiciones de cada uno de ellos, distr ibuirlos en tres clases o grados, a saber: Aprendices, Compañeros y Maestros. Los salarios por él establecidos eran distintos, y para que ninguno usurpara los que no les correspondían, dió a los obreros, para cada grado, signos, toques y palabras, respectivamente diversos. Los Aprendices cobraban el salario en la Columna B, los Compañeros en la Columna J, y los Maestros en la Cámara del ~Iedio. Adelantaban rápidamente los trabajos, y cuando se aproximaba el término de la edificación del 'I'emplo, tres Compañeros, descontentos de su paga e impacientes por ser Maestros, lo cual no habían conseguido por su desaplicación al trabajo,

- 61decidieron obtener por fuerza la palabra ,dr este grado, amellClzando de 111UP1't('al Respetable Maestro Hirám, para, una vez en posesión de e lla, presentarse en los 'I'a lleres esparcidos por toda la superficie de la Tierra como MapsÚos regulares. r cobrar el salar-io señalado a esta elevada catezoria. Esos tres miserables Compañeros se llamaban Jubelás, Jubelós y Jubelón. Pausa,

Da un golpe de mall.·.

y dice:

M,·, Resp .'. Mae3t, ,-¡ Sea por siempre execrable la conducta de los traidores! (Luego continúa): Sabedores los falsos Compañeros de que todos los días, al dar las doce, visitaba Hiram el edificio durante la au iencia de los trabajadores, convinier-on, para roa lizar su designio, apostarse a esa hora en las tres puertas del Templo, y esperar allí al Maestro. Pausa, durante la cual, el Prim.. Vig ,., tirando de la cadena que tendrá al alcance de su mano, da doce campanadas con lentitud. El 1\1.. Resp.·. 1\Iaest.·. prosigue: M .. Resp .. Maest .. -En efecto; en esa hora precisase coiocó Jubelás en la puerta del Mediodía, Jubelós en la de Occidente y -Iubelón en la de Oriente; armándose, el primero, con una regla; el segundo, con una escuadra, y el último, con un pesado mazo. En este momento, el Ven.'. Maestro Experto y pl de Ceremonias hacen 'levantar al recipiendario y le conducen andando m uv despacio, ante el Altar del Segundo Vigilante, El l\I. . Resp .'. Maest .. continúa sin interrupción: M,'.

Resp.·. Maes .. -Cuando Hiram hubo terminado su visita de inspección, se dirigió para salir a la puerta del Mediotlia, en donde le atajó el paso Jubelás, pic1iéndole la palabra de Ma estr o, a lo que Hir am respondió que no era aquella la manera de' obtenerla, sino esperando cumplir su tiempo. Y como el traidor le amenazara" de muerte, replicó Hi ram : "¡ Desgraciado 1" ¡ La ignorancia te convierte en mi enemigo 1" Entonces .Jubelás, ciego de furor ante la negativa d e l Maestr-o, le d ió a

-

62-

éste un fuerte golpe en la ga rganta con la regla que llevaba en la mano. 29 Vig-.·. -(Poniéndose de pie, ~r dirigiónrlose al reci pieuda rio, d ice ) : Dame la palabra de Maestr-o. Recípiendario.c-N o la teng-o. Esta pregunta se hace por tres veces, y el recipiendario contesta otras tres, A la última, el 29 Vig .. da un golpe en el cuello con la regla al recipiendario, dicieudo . 29 Vig· .. -¡ Muere.' M.'. Resp.·. Maest.·.-Hiram, mal herido, huyó hacia la puerta de Occidente. en donde encontró al segundo Compañero. el cual se interpuso haciéndole en seguida la misma petición que .Iubelás, y recibiendo igual negativa. El recipiendar-io es conducido por el Experto y Maestro de Ceremonias al Altar del Primer Vigilante. El Muy Respetable .Maestro continúa su relato, sin cuida rse de estas ceremonias. Al ver la firmeza del Maestro, -Iubelós, ardiendo en ira, le dirige insultos y amenazas, a las que contesta Hirán lament ándose de que la hipocresía oculte la maldad del Compañero traidor; pero fste, al ver que no lograba su intento, le asestó 'un terrible golpe en el corazón con la férrea escuadra que llevaba en la mano. Prim .. Vig.·. (Levantándose).-Dame la palabra .agrada. 'I'res veces se hace la pregunta y otras tantas responde el recipien dario. ."" la última negativa, .f'l Primer Yigrlante lf' da un golpeen el pecho con la escuadra diciendo: Prim ..

Vig .. -¡ Entonces,

muere!

Durante el relato que sigue el recipiendario es llevado sus conductores a los pies del ataúd, en donde permanecerá, rando al Oriente, hasta el momento oportuno.

por mi-

M .. Resp.·. Maest.·.-Hil'Úm quedó aturdido ])01' este golpe, pero haciendo un esfuerzo se dir-igió con paso vacilante a 'la pueda de

63 Oriente. A\lIí le esperaba .Jube lón para hacer-le la misma demanda que sus cómplices, y recibió del :J1aestro la misma respuesta. Mas como insistiera el malvado Compañero en rus pretensiones, le dijo Il irám : "No tendrás jamás la palabra sa(rt'acla de ';\faestro, porque te domina la ambición," ,Jubelón, en~oncps. al encon tra rse defraudado en su propósito, levantó el martillo de que se había provisto anter-iormente, ~. dando a Hirá m un f'ner t isi mo g-olpe en la frente, le tendió muerto a SU!; pies. El ':\1.'. Resp . . :JIaE'st." .lleva ndo el nia ll .. en la mano clrrl'c!Ja, baja del trono. ~. colocándose delante del recipiendario le dice por tres veces : ./

M,', Resp .. Maest .. -DaIllP Recípíendario=-No la poseo.

la palabra

sagrada

de Maestro.

A la tercera negativa da un golpe en la frente con el ma ll .. al recipiendar io e m pujándole hacia atrás ,\', diciendo : j muere ! Los Venerables Maestros Experto ,\' de Ceremonias, que se hallan a ambo,' lados del Compañero. le tie nd n en el ataúd, cubrióndole en seguida con el paño mortuorio y colocando encima de éste una rama de acacia. Entre tanto, el :J[ .'. Rexp .. Maest .. vuelve al trono ~. toma asiento, cont inua ndo iumed ia tam entr- su relato.

M., Resp . . Maest .'. -Cometido

el cr-imen , lo.'; tres asesinos 'ie reunieron, y unos a otros e pidieron la palabra de :JI::1estro. lila.' cOllqH'elldielldo' que el crimen habia ido inútil, pues ninguno de ellos logró obtener-la. tan sólo pensaron en ocultar el ca dáver el' IIirám eubrié'ndolp pi'o visiona huent e pon tierra y escornbros, ~. al anochecer 1p llevar on lejos de la ciudad, enterr ándol(! en un bosque. .

La ausencia de Hirá rn en los trabajos hizo sospechar de ~al0ll1ón que tal vez habia sido víctima de algún atentado por partp de Pllemigos envidiosos de su justa fama, ,\' 110 tardó en r~vp1ar a los obreros la terr-ible catástrofe, cuando supo que hablan faltado a la lista tres Compañeros. Entonces se reun ieron lo-, ~rapstl'os en la Cámara del ~1eclio, t a pizú ndola de npg'ro en

-

64-·

señal de luto, y convinieron con Salornón emplear cua ritos medios fueran imaginables para oncontru r el cuerpo del Maestro, con el fin de dar le honrosa sepultura. Al efecto, fueron enviados nueve Maestros, .v éstos partieron en seguida, siendo inútiles sus pesquisas durante los dos primeros días. Al tercero, encontrá ba nse reposando de sus fatigas en un bosque situado al pie del monto Líbano, cuando uno de ellos notó cerca de sí un montón de tierra que parecía removida. Llamó sobre este hecho la atención de sus acornpaíiantes. y todos se decidieron a cavar en aquel sitio, logrando descubrir un cadáver, en el que reconocieron el cuerpo del Maestro Hiráru. Vol vieron a cubr ir!e, y colocando encima una rama de acacia para conocer el sit io donde vacía el cadáver, se dir-igieron a Jerusalén a dar cuenta al rev Salomón del triste hallazgo. El M .. Resp .. Maest .'. da un gol pe' de rnall .. y dice: M.'.

Resp .. Maest.·.-Venerables hermanos Primero y Segundo Vigilantes, invitad a los Maestros de vuestras Columnas para que, imitando a nuestros antepasados, os ayuden a buscar a nuestro Resp .. Maestro Hirám-Abí.

Tl0S Vigilantes, seguidos de los Maestros de sus respectivas Columnas, dan la vuelta a la Logia, dirigiéndose en sentido opuesto, unos por el Norte y otros por pl Mediodía. Al concluir la vuelta, e'l Primer Vigilante coloca en la mano derecha del recipiendario, que permanece en el ataúd, la rama de acacia. Vuelven todos a sus puestos, y el Primer Vigilante, dando un golpe de mall .. , dice: Prim ... Vig' .. -l\'Iu~· Respetable Mastr o, en nuestro camino hemos llegado a un lugar en donde se habla un cadáver, en el que 110S pareció haber reconocido a nuestro Resp .'. Maestro Hirám. Sobre ·('sr tumba hemos colocado una rama de acacia. M .. Resp .. Maest .. -El rey Solomón, tan pronto como se hubo enterado del hallazgo del cuerpo de su hábil arquitecto, or-denó a los nueve Maestros que volvieran por él y le condujer-an a .Jerusalén, procurando buscar sobre &11a palabra de Maestro. Pero como creían no hallarla, juzgando que estaba perdida, acorda-

- 65ron que el primer 'si¡.rl1o que hicieran y la primera palabra que pronunciasen al descubl'ir el inanimado cuerpo de Hirám, fuera eu adelante el signo ," I~ pa la br a que reemplazara a los que se habían perdido, Partieron en sf'g'uida pae-a el Líbano los nuevos Maestros. y If'Yantal'on el CUC'l'pOde Hirám. Da un golpf' de mall .

M"

y dice:

Resp,', Maest, ',-Yf'nerables hermanos, imitemos también a los antiguos Maestros, :': probemos a levantar el cadáver del desg-raciado Hi ram. 'I'odo~ los Maestros dice entonces:

rodean

el ataúd.

~. el Primer

Vig ,',

Prím .', Vig, ',-Muy M,',

Resp., 'Maestro, aquí veo una rama de acacia. y, pOI' tanto, aquí está depositado el cuerpo de Hirám. Resp.', Maest .. -Ven .'. h,. Segundo Vigilante, probad a leyantar el cuerpo de nuestro Resp ,. Maest .'. Hirarn, por el toque ~' la palabra de Aprendiz,

el

El Seg . , Vig' .'. dice, despué: Resp .'. ~Iaest. ,

de ejecuta!'

lo ordenado

por

~r.',

Seg,', Vig .. -Es imposible. Muv Respetable Maestro , la carne se separa de los huesos. M" Resp .'. Maest.',-Intent.acl, Ven . . h.'. Primer Vigilante, levanta r por el toque y la palabra de Compañero el cuerpo de nuestro Resp .-. Maestro IIiram. El Primer dice:

Pri.m, M"

Vigilante

cumplimenta

lo ordenado,

r

luego

V'. , 19. ,-;";0 puedo, Muy Resp .'. Maestro, porque la carne abandona los huesos. Resp>, Maest,'.-Veamos si vo soy más afortunado. Ayudadme, Venerables Maestros tO(l~i:i. 1 El ~r., Re p., Ma est .'. baja del Oriente, acompañado de Oi; 11h.', que se encuentren en él. T

-

66-

s'> aproxima al ataúd; coge al recipiendario de la mano derecha fonmando la garra con la suya, y ayudado de los 1\1a2 ·tro . que rcdean el féretro, lo levanta por lo cinco puntos de ])(>1'fección, pronunciando a su oído la palabra sagrada de Maestro. El iniciando queda de pie en el mismo sitio, Se hace desaparecer el féretro; la Logia se ilumina completamente; el 1\I.. Resp.·. Maest , . vuelve al Oriente, y todos los hh .. a sus Columnas. M .. Resp.·. Maest.. (Dirigiéndose al recipiendario) .-Querido hermano N ..... : Ya que conocéis la causa de nuestro profundo dolor; nuestros pr incipios basados en la moral, nuestro objeto, que es el de ilustrar a los hombres para que logren el bienestar social, sin que por estos trabajos debamos obtener recompensa alguna, ¿ queréis unir os a nosotros para laborar en esta obra de abnegación y de moralidad? Recipiendario.-Sí quiero. M .. Resp.·. Maest .. -Considerad que vais a enlazaras, el nosotros por una promesa o juramento de los más sagrados que puede un hombre pronunciar, y porque conviene que lo hagáis con perfecto conocimiento de causa, os he informado de los principales deberes de los Maestros. Consentís en prestar esa promesa de vuestra Iibre y espontánea voluntad, sin que a ello o induzca otra consideración que el propósito de cumplirla? El recipiendario contesta afirmativa mente. Todos los nerables Maestros se descubren. El Maest .'. de Ceremonias conduce all iniciado al Altar las promesas y le hace extender la mano derecha sobre, la cuadra, el Compás y el Libro de la Ley. El1\I. . Resp· .. Maest .'. continúa: M.'. Resp .', Maest.·.-Fijad toda vuestra atención en la promesa vais a prestar, que es la siguiente: Juramento

Vede Es-

que

o Promesa

"yo ..... (nombre y apellido), miembro activo de este Resp .. Taller, me ratifico en las promesas de Aprendiz y de

-

67-

Compañero que anteriormente he prestado. 'I'arnbién juro (o prometo) solemnemente en presencia del G,. A.'. D.'. U .. , de todos lo' l\Iae ..tres aquí reunidos ,v a la faz de todos los hb.. esparcidos por la superficie de la Tierra, cumplir bien ~' fielmente las obligaciones que me impone el grado de Maestro que se me confiere por esta Resp .. Cámara. Asimismo prometo practicar :' propaga!', 1"11 donde quiera que me halle, lo pr-incipios de la F'rancma .oneria : amar a Ja verdad, fuente de todo bien, ~' huir de la mentira, origen de todo' Ios males; buscar los medio para ilustrar mi inteligencia y fort.ificar mi razón; amar gundo Vigilante? Seg , , Vig, ·.-Tam.bién se hallan contentos .v satisfechos, M.. Resp .'. Maest,', -El Ven . . Maestro Orador se servirá maruf'esta r su opinión sobre los trabajos que hemos realizado, Orador.-Han resultado justos y perfectos, Muy Resp . , Maest . M .. Resp .'. Maest,·.-Ven,. h,. Primer Vigilante, &a qué hora a costumbranl os ::'Ir aestros Masones cerrar sus trabajos? Prim .'. Vig·.·.-A media noche, ~1. . Resp .'. Maest . . M.. Resp.. Maest.·. -¿ Qué ho ra es, Ven.'. h.. Segundo Vig .. ? Seg. '. Vig .. -l\Ieclia noche en punto, M.'. Resp.·. Maest .. -Siendo la hora en que los Maestros Masones tienen la costumbre de cerrar sus trabajos, y éstos han resulta do justos y perfectos, invitad, Venerables hermanos Vigilantes, a los Maestros de vuestras respectivas Col umnas como ~'O invito a los que se hallan en Oriente, para que, unidos a vosotros y a mí, nos ayuden a cerrar los trabajos de esta Cámara del Medio, . Los hh .. Vigilantes hacen el anuncio, y después, Respetable Maestro, dando un golpe de mall.·., dice: M.'.

el Muy

Resp .. Maest .. -En 'pie y al orden, Venerables Maestros. (Todos obedecen.) A.'. L .. G.'. D .. S.'. A.'. D .. L.'. M .. En su nombre, y. bajo la autoridad que me han conferido, declaro cerrados los trabajos de esta Resp .. Logia, en su Cámara del Medio y en ten.'. magna de exaltación (u ordinaria, extraer-

-73linaria, etc.) .A mí por el signo (lo hacen); por la ba t .. (la ~l,pit(,Jl); por- la aclamación. i Liberta d, Igualrla-l , 1"l'atE'rnidad! . ¿ Prometéis no re vel a r a nadie lo ocurrido en esta Cámara? Todos.-(IlaciE'lldo

el signo (le ascntimieuto.)

Prometemos.

En las tenidas ordinar-ias de la Cámara de Maestros, ~l se h nbiera ordenado que a bandona ran definitivamente el local los Compañeros ,\' Aprendices, se les hará entrar suceel'sivamellte en el Templo para cerra l' los trabajos r-n el gr .'. 2Q ,\' después en el de Aprendiz, en la forma acostumbrada, seg-(m prescribe la liturgia del Rito. 110

INSTRUCCION Del grado

de Maestro

Los Maestros :\la sones viajan del Occidente al Oriente,\' del al :.\Iecliodía, para esparcir por toda la tierr-a la Luz Masón ica , unir lo que está separado y propagar las ideas de 1,rater.ii la 1 [-niversal. Al decir que conocen la Acacia, quieren expresar que cnnocen la Francmasonería en general y la Maestria en particular. La Acacia recuerdo al :.\laestro que una rama de ella sirvió de eñal para de 'cubrir el cuerpo de nue tro Rcsp .. Maest .'. Hiram . Es para los masones modernos lo que fué el 10tD en las iniciaeiones egipcias, el mirto en los miste rios eleusin os de Grecia, el muérdago el.e lo~ Druidas de la antigua Galia, teniendo la misma interpretación imbóliea que le damos en la actualidad. . En efecto; por su verdor constant .r su madera incorruptible e m~Iterable, la Acacia es el emblema de la inmortalidad, una de la. maN bellas aspiraciones del hombre. Esta ólo se consigue descubrienestudiando, desarrollando v sosteniendo los principios de la ci1 lzación humana. .

.1

orte

d;,.

. La Acacia pos.ee también la' propiedades de ser perjudicial a los lIl8ecto ,. i 1iacia. ab' " dañi nmos, a Ios que rechaza, y de inclinar sus ho 10Jas h a~o durante la noche, en tanto que, apenas aparece el Sol en el se yerguen para dirigirse hacia el astro del día y seguir la d?rlZo~te, lrecClOn d ' t d . . e es e urante su carrera diurna en el espacio. L'

-74 Estas propiedades de la Acacia enseñan al Maestro que el masón debe rechazar los vicios, practicando ila moral, como aquélla rechaza los insectos perjudiciales, y que los iniciados cn los misterios masónicos, elevan su pensamiento desde las tinieblas de la ignorancia ha ta las regiones resplandecientes de la Luz y de la Verdad, y la bu. can y siguen con. tantemente, del mismo modo que las hojas de la Acacia, abatidas en la obscuridad, parece que se animan con la aparición de la luz del Sol, colocándose al punto en la dirección seguida por el astro que las da calor :' vida. El Taller donde trabajan los "Maestros se denomina Cámara del M~dio, para significar que los masones que han llegado al último grado de la instrucción simbólica, son los encargados de trazar los planos que deberán seguir los Aprendices y Compañeros colocados bajo su vigilancia. y, por tanto, . u Taller estará colocado en el medio, o bien en el centro, porque la perfección humana, siempre limitada y relativa, a la que el Maestro debe aspirar, equidista del estado de instrucción, que simbolizan los Aprendices ~' Compañeros, y de la perfección absouta, simbolizada por el G.·. A .. D.'. U .. A la Cámara del Medio, construida en el interi.or del 'I'emplo moral que los masones edificamos, se sube por una escalera de tres, cinco y siete peldaños; el primer tramo representa la iniciación en los misterios de la FrancmasonerÍa; el segundo. los conocimient.os adquirido. en el grado de Compañero, y el último tramo, la completa instrucción en las siete artes liberales, que, según las antiguas denominaciones, son: Gramática, Retórica, Lógica, Aritmética, Geometría, Música y Astronomía, cuyos primeros conocimientos se obtienen en la Cámara de Compañero. Los Maestro: saben manejar todos los instrumentos del trabajo ? están obligados' a dirigir y a enseñar a lo demás obreros, conservando con frecuencia en sus manos la paleta o llana, para que, así como el albañil la emplea para pulimentar su obras materiales, allanando las superficies ~T corrigiendo las desigualdades que las deforman, la use cn el sentido moral para perfeccionar la instrucción, corregir y suavizar los defectos de nuestros hh .. La leyenda relativa a la trágica muerte del Resp .'. Maest . . Hiram, r. interesantísima por su hermoso simbolismo, :' tiene para el Maestro ::\Iasón distintas interpretaciones. Tomada al pie de la letra, no presenta nada a la imaginación el. hecho de la muerte de un jefe de trabajos, asesinado por tres obreros pérf'idos, llevándose consigo a la tumba el ecreto de lo planos para la edificación mag-

-75 _," de un monumento, acaecida en un pueblo célebre por sus desIJ.I.I.lca . . acias )' proscripcio!1rs. ~~os aeon teci mien tos, t~n comunes, no son : os de ocupa!' la atenClOl1 de tantos hombres Ilustrados de todas la gDnacionrs, como h~n. pasado en el transcurso del tiempo por la In titución FrancmaSOlllca. . Pero si nos fijamos en al significación moral e intelectual de ta leyenda, adquiere gran interés para el Maestro Masón. En efecto' en tal concepto, representa las continuas luchas del hombre 'con ~ pasionrs, de las que aje vencedor practicando la virtud; la de la Luz contra las tinieblas; la de la Humanidad contra la Ig nornncia, la Hipocresía r la Ambición; el esfuerzo que debemos hacer para llegar a la posesión de los secretos de la ciencia, por la perseverancia y el estudio, único medio para conseguida, si deseamos proporcionar la libertad a nuestro espíritu y la dicha a nuestros hermanos en la Humanidad; la necesidad de guardar en nuestro. pecho los secretos de la Orden, prefiriendo morir antes que revelados, )' ayudar' con todas nuestras fuerzas a los que cumplan las promesas que prestaron al pie del Ara, aunque esta ayuda, en los momentos de p ligro, pueda costarnos Ia vida, del mismo modo que a Hiram-Abi, nuestro Resp.·. Maestro. Ahora bien; en todas las antiguas leyendas de las iniciacioues egipcias y mi thr-iaeas, se encuentra un héroe herido de muerte por uno o varios mon .truos, y que tiene una esposa y un hijo. Ese héroe era el Sol, la esposa era la Tierra y el hijo era el Hombre, A pesar de diferenciarse entre SI estas leyendas, todas convergen. aunque por divflrsas vías, al mismo fin. Una' veces el héroe resucita, otras e vengado y reemplazado por su hijo, el nuevo Sol. Estos dos casos se encuentran en la leyenda de Hiram. basados en los f ' Pero si recurr-imos a los mitos de la autizüedad o , enomen(\s astronómicos, hallaremos la analogía que tienen con la leyenda que caracteriza la iniciación en el arado de Maestro v dedueiremo d b, J S e este hecho provechosas revelaciones. J.Ja.marcha de Hiram para escapar a los golpes de sus asesinos, ~ ~a mIsma que sigue el Sol (Osiris) en el último mes del año en que .,aJa al ho . onte , telllpl ,rlz por la puerta de Occidente. Si en ese momento conlev :amos la esfera, observamos en, Oriente a Orión, con el brazo y ~ do y armado con una maza; a Sagitario, disparando su flecha, golpe. o~te a, Pe:seo, armado igualmente y dispuesto a dar el último llBtral e este lllstante, la inclinación del Sol hacia el hemisfer-io es tan rápida , que semeja. una calid a, y ya 1e tenemos p reci-.

-76 pitado en la tumba. La inquietud que debieron sentir los primeros hom bres a cerca de si el astro desaparecido volvería a renacer, está figurada por las pesquisas que se hacen en busca del cuerpo de Hiram, Así es, que su muerte, tomada en el sentido alegórico. es 'como la pasión de Osiri , de Adonis o de Mithra, una creación (le la imaginación de los sacerdotes, todos ellos astrónomos, cuyo objeto era pintar la ausencia del principio, o sea la lucha de las tinieblas ~' la luz, según' hemos dicho anteriormente. La interpretación astronómica de los instrumentos usados por los tres falsos Compañeros, puede expresarse como sigue: el Sol, en el solsticio de verano, inspira a los seres reconocimiento y gratitud, y su benéfico calor despierta nuestros sentidos, haciéndonos percibir 'ef'luvio« de nueva vida y bienestar. Hirarn le, representa, y es él, por lo tanto, el que posee v puede dar la pal .'. sag .. , es decir, la vida. Cuando el 801, en su marcha retrógrada, simbolizada por la del Compañero que en tra hacia atrás en la Cám.. del Medio, desciende a los signos inferiores del Zodiaco, el trastorno de la Naturaleza comienza y aparece su infecundidad. Entonces Hiram ya no puede dar la pal .'. de m .. a los Compañeros representado por los tres últimos meses del año. Dicese en la leyenda, que el primero hiere a Hiram con una regla de veinticuatro pulgadas. imagen de las horas del día en que tiene lugar la revolución terrestre; primera disminución del tiempo en .que el Sol brilla en la esfera, que atenta débilmente a su- existencia, dándole el primer golpe. El segundo Compañero le hiere con. una , escuadra de hierro, símbolo de la última estación, figurada en las intersecciones de dos líneas rectas que dividiesen en cuatro partes iguales el círculo zodiacal, cuyo centro sirnboliza el corazón de Hiram, donde concurren los vértices de los cuatro ángulos; segunda disminución del tiempo en que brilla el astro en esta época, que asesta un golpe más fuerte a la existencia solar. El tercer Compañero hiere mortalmente a Hiram en la frente con' un mazo, cuya forma cilíndrica sim baliza el año, palabra que significa aníno (círculo o anillo); tercera disminución del tiernpo.; pues la terminación del año da el último golpe a la existencia del Sol expirant e. Asimismo, en esta época (Diciembre). en que el SoL de invierno parece abandonar nuestros climas pa ra reinar en el otro hemisferio, semejando que baja a la tnmba, la naturaleza queda viuda de"! e poso

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-- 77recibe l'aela año la alegría y Iecuudidad , sus hijos están deso1 la na t ura 1eZR, que en '1101' esa razón los masones, 1" llJOS (e 1 d 8,tO":'1:' lo de Maestro representan esa mallísima alegor'ía se derioes e •.. ~T' l ' " d P 1 S o1 toman minau 11 ' J) .. L .. 1,'. as] como a a rcaparrcion el 1I0mbl'('