Nociones De Prehistoria General

Citation preview

Jorge Juan Eiroa

Nociones de Prehistoria general

Arie/ Prehis/OIio

CAPITULO

1

EL CONCEPTO DE PREHISTORIA Historiografía de la investigación prehistórica. - Los inicios de la cien­ cia prehistórica. - PrehiSlOria y Etnología. - Los conceptos de cultu­ ra y civilización. - Algo de hislOria de la Etnologfa. - La periodiza­ ción de [a Prehistoria.

Historiografía de la investigación prehistórica El término «prehistoria» se refiere tanto a una etapa de la Historia que tradicio­

nalmente ha estudiado a los seres humanos ysu cultura desde sus orígenes hasta la aparición de la escritura. como a la disciplina científica que la estudia.

Aunque la tradicional periodización de la Historia pasa hoypor una seria revi­

sión. en general se siguen respetando los términos Prehistoria, Edad Antigua, Edad

Media. etc., que son concebidos como cómodos mojones cronológicos, aunque, en realidad. la multiplicación de los li{X's históricos individuales ha hecho que estos

términos se desplacen en el tiem{X'. o se desdibujen, «difuminándose muchas ve­

ces». como apuntó Roderick Floud. Hoyes evidente que las modernas categorías

historiográficas han propuesto nuevos niveles conceptuales en la Historia. superando tradicionales esquemas que la más recieme investigación ha convertido en obsoletos.

Sin embargo, los tradicionales términos que desde mucho tiem{X' atrás han definido las etapas históricas. siguen teniendo un evidente valor referencial. que se hace paten­ te hasta en las denominaciones de los departamentos universitarios de las facultades de Historia.

Así, la PrehislOria sigue entendiéndose como una disciplina histórica, pese a su

constante renovación metodológica, que la ha convertido en una disciplina «cien­

tífica» en la que los estudios de laboratorio tienen tanta im{X'rtancia como los de gabinete.

La Prehistoria ha sido concebida como una disciplina histórica. entendida ésta

como el análisis del pasado de la humanidad, {X'rque orienta su estudio yel de sus manifestaciones culturales en las dimensiones de espacio ytiem{X'. Pero también es

una disciplina científica {X'rque, para estudiar los conceptos yla dimensión formal, ha desarrollado una serie sistemática de métodos ytécnicas de estricto carácter científi­ co, aprovechando los avances tecnológicos de los dislintos aspectos parciales de la

.

cIencIa. .

13

NOCIONES DE PREHISTORIA GENERAL

El CONCEPTO DE PREI1ISTORIA

Afirma R. C. Dunnell que la Prehistoria es «la ciencia de los artefaclos y las rela­ ciones entre anefaclos. llevada según el concepto de cultura". La definición

Algunos autores, como Irving Rouse. han afirmado que mientms la Arqueología, ¡x>r definición. se limita que tiene un enfoque analítico. es «una disciplina tópica que. nidad», la Prehistoria es «una disci· a los rasgos materiales supervivientes de la huma s, la religi6n. plina totalista de los rasgos humanos, incluyendo las estructuras sociale las lenguas, que no dejan restos arqueológicos». De esta manera, la Prehistoria es la ciencia que eSl/ldill los restos de los seres ¡"",¡(mas y de sus actividades COII el fin de illlerpretar sufOnllll de vida en ulla época

12

como tcciencia» no le presenta ninguna duda. puesto que. :Iñade, «siempre que una disciplina dada posca una estructura teórica que pueda utilizarse para organizar sis­ temáticamente los fenómenos con el fin de explicarlos de una manera comprobable. lal disciplina puede considerarse ciencia •. La proyección científica de la Prehistoria se orienta en dos direcciones básicas: por un lado. la investigación cicnlífica del origen y pasado de los seres humanos, apoyándose en los Icstimonios materiales que de ellos se han recuperado a tmvés de la Arqueología. y, por otro. la elaboración de un esquema interpretativo del pasado de la humanidad, verificado y perrectamente comprensible. Aunque se trata de una disciplina relativamente joven, puesto que tiene poco más de un siglo de existencia, el concepto de Prehistoria ha ido evolucionando a lo largo de su desarrollo científico. puesto que la teoría global. es decir. la concepción que tienen los prehistoriadores sobre la rorma y los mecanismos de evolución de la cultura. ha pasado de estar principalmente basada en principios de natumleza históri­ ca (cronología, tipología. descripción de hechos...) a fundamentarse en otros desde la reRexión cientffica, en la que los datos utilizados. frecuentemente procedentes de complejos procesos en los que están implicadas otras disciplinas, deben estar verifi­ cados y contmstados. Así. siendo la Prehistoria una disciplina académica y una ciencia, es también un tipo detenninado de estudio que ha requerido el desarrollo de una teoría formal y, a continuación, la definición del campo de eSlUdio en el que esta teoría es operaliva. . 5111 embargo, en sus primeros tiempos la Prehistoria adoptó los fundamentos básicos de la Paleontología para establecer las fases culturales, de la Geología par � poder fechar los acontecimientos a los que se refería y de la Historia para. ¡x>r fin, Interpretarlos. De hecho, los antiguos términos de «Edad del Reno» o «Edad del Hielo •. usuales en la época de los primeros gmndes prehistoriadores. como Édouard Lartet

(1801-187 1) Y Gabriel

de Mortillet

( 1 82 1 - 1 898), a finales del siglo XIX. hacen

referencia a esta situación. A diferencia de otras disciplinas históricas, hoy la Prehistoria ha desarrollado un excl�sivo lenguaje técnico para referirse a sus conceptos y ha logrado una concomi­ tancia adecuada con otros aspectos parciales de las ciencias, como la Antropología. la . . Genética. la BIOlogía, la Geología, la Geografía. etc" pam hacer frente a detennina­ dos p�blemas eS ecf cos que habit almcnte surgen en el proceso de investigación y � ' estudiO de las eVidenCias arqueológicas. principal fuente de abastecimiento de datos pam los prehistoriadores. E n ocasiones, se ha identificado a la Prehistoria con la Arqueología prehistórica. La A �queología (etimológicamente .. discurso sobre las cosas antiguas») eSlUdia sis­ te �átlcamente la antigüedad, mediante la aplicación de métodos y técnicas propios,

p �

telllendo como principal finalidad la recuperación de los restos del pasado para poder extraer de ellos los datos necesarios que pennitan reconstruirlo o. más bien, crear de . él una Imagen 1 0 más aproximada que sea posible a 1 0 que fue la realidad. Se tmta oc una disciplina científica que estudia las manifestaciones culturales de las socieda­ des pretéritas basándose. esencialmente. en los restos malCriales y en otros datos que puedan extraerse del cOlllexto general. cndicntco", t,'cne" evo1UClo. nes pa ones sociales, aunque (en�esos económicos, produciéndose cnton I bl. ra/el,as en relac'rón Con los pro9ue pueden ser IOlaJes. meUclSl.uso de caráclCr revolucionario. Es(asCfJe�� � �orsocgainales Ones posteriores y fueron ampliadas rna ,reCIentemen tuvIeron profundas repcr­ de J. H. Sleward. autor de la obra El ("( 11/ � c lillf te con el neocvolucioni�mo ral (1955) Y de G. P . M � � E l evolucionismo tuv � . ur do ck . c a ec lS I a en sólo e� lo que se refiere a I ���;:;�� � e 1as cu�tura los estudios �rchistórico prehistóricos de Santander.), la Prehistoria

18

ELCONCEI"TO DE PRI;IIISTORIA

NOCIOf\ES DE 1>f{EHISTORIA GENERAL

adquirió cana de naturaleza. corno disciplina estrechamente vinculad:1 a la Geología y a las Ciencias N:lturales. Al mismo tiempo se descubría el arte paleolítico. en el que Sautuol:1 (18311888), descubridor y difusor del conjunto de Ahamira (Sanlillana del Mar. Canta­ brial en 1879. luvO un papel relcvanle. En efecto. cuando realizaba excilvaciones ar­ queológicas en el yacimiento del inlerior de la cueva se descubrieron las pinturas de la sala adyacente a los trabajos arqueológicos. En 1880 publicó en Samandcrel opúscu­ lo Brel'es apllllfes sobre a/glll/os objetos preltist6ricos de la prOl'illcill de SlIIlI(Uuler. pero sus propuestas de filiación prehistórica fueron rechazadas. sobre todo por los prchisloriadores fmnceses. Sus únicos defensores fueron el español J. Vilanova y el francés E. Pielte . Pero poco después. tras descubrirse en Francia las cuevas de La Mouthe. FOnl de Gaume. Les Combarelles y Marsoulas. todas con ane paleolítico. se reconoció la autenticidad de Altamira y la cronología paleolítica propuesta por SaulUola. cuando el erudito cántabro ya había fallecido. Tras la visita a Altamim de 11. Breuil y E. Car­ lailhac, en 1902. este último publicó un famoso artículo en la revista L 'Alllhrop% gie, con el subtítulo de teEI mea eulpa de un escéptico». en que se rehabilitaba la figura de Sautuola. Como la península Ibérica em un tcrrilorio rico en evidencias arqueológicas. muy pronto :lIrajo la atención de los estudiosos extranjeros. Así. el profesor francés Émile de CanaiIhac publica en París. en 1886. Les iiges préltistoriques de / 'Espaglle et d/( Pormgtll. obra repleta de datos. fruto de sus investigaciones en la Penínsul a; el ingeniero belga Luis Siret y Cells. que había trabajado durante años en la minería andaluza. sobre todo en tierras almerienses de Herrerías y la Sierra de Alman1.Of3. y había descubierto numerosos yacimientos calcolíticos y de la cultura argárica. pu­ blica en Amberes. en 1887. su importante obra Las primeras edlllles del Mettll ell el Sudeste de E�I)(lIill. y poco después, en 1893. L"Espaglle préhisloriqlle. obra s a las que seguirían otros muchos trabajos. España se convierte en lugar de trabajo de des­ �acados investigadores como E. Cartailhac. H. Breuil. H. Obermaier y otros. jUnio a inolvidables nombres de prehistoriadores españoles, como el marqués de Cerralbo. H. Alcalde del Río. J. M. de Barandiarán. el conde de la Vega del Sella. P. Alsius. J. Pérez de Barradas y otros. . L:a creación en 1911 de la Comisión de Investigaciones Paleontológicas y Pre­ hlstóncas y en 1912 de la Junta Superior de Excavaciones supuso el reco nocimiento oficial de la ciencia prehistórica. que pocos años después empezaría estu a diarse en las universidades españolas. Por entonces. ya se estaban desarrollando en España importantes trabajos ar­ queológicos (Villaricos. 1890: Los Millares, 1892; Almizaraque. 1906; Torralba. 1907: Cueva del Castillo. 19 l 2. etc.) que convertirían el territorio peninsular en uno de los más atractivos para los investigadores de Europa occiden tal. Los inicios del desarrollo científico de la Prehistoria coinciden, a prin . cipios del sIglo xx. con la época de los grandes descubrimientos arqueológico s de las civili­ zaciones clásicas y orientales. así como con los primeros avances en la metodología . de I�s trabajOS de campo. Debe recordarse que en 1822 J.-E Champo lion consigue deSCifrar los jeroglíficos egipcios. entre 1840 y 1850 Paul E. BOlla y Austen 11. La­ yard excavan en Mesopotamia. en 1850 H. Rawlinson extrae los vestigios de Níni­ ve. en 1840 J. L. Stephen