De la Segunda Guerra Mundial a la Revolución Cubana Historia Del Movimiento Obrero cuarta parte parte 2 [4b]

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HISTORIA DEL MOVIMIENTO

OBRER0/4**

e Centro Editor de América Latina

Cuarta Parte

De la Segunda Guerra Mundial a la Revolución Cubana

Italia 1945-1960 Horacio Bernardini

''El sindicalismo no es todo. Sean activos en los asuntos sindicales, pero no olviden que además de ganar salarios más elevados existen otros objetivos." Palmiro Togliatti, 1961.

1 ano 1945 es el afio de la derrota del fascismo y del i J gran auge del movi~ miento obrero ita· liano. Todos los partidos antifascistas de izquierda se transfor· maron en gigantescos partidos de masas. El partido Comunista pa· só de 400.000 miembros en abril a 1.700.000 en diciembre, el Partido Socialista Hegó a contar con 800.000 efectivos y el Partido de la Acción, que expresaba las tendencias de la pequeña burguesía radicalizada, tenía aproximadamente 250.000 miembros. Den· tro de la democracia cristiana te· nían mucho peso las corrientes de izquierda. en especial entre la juventud. La Confederación Ge· neral del Trabajo (CGIL), central única de los trabajadores, llegó a reunir rápidamente 5.000.000 de afiliados. En todas las grandes fá· bricas del norte funcionaban los comités de gestión formados durante la insurrección; los mismos disponían de un fuerte poder a pesar de que no eran reconocidos legalmente. Los esfuerzos guber. namentales y de las tropas aliadas para depurar los comités de sus miembros más radicalizados se enfrentaban con la férrea re· sistencia de la clase obrera. En el Mezzogiorno se desarrollaba un potente movimiento de braceros y campesinos que cuestionaba seriamente la estructura económicosocial tradicional. La orden de desarme de las fuerzas guerrille· ras, impartida por el gobierno con el apoyo de la dirección del P. C., no había sido acatada totalmente: muchas armas habían sido escon· didas. En su conjunto, la clase obrera tenía conciencia de su po· derío, conciencia de que ella había derrotado al fascismo. Las expectativas revolucionarias cruzaban de norte a sur toda la so· ciedad italiana. Se esperaba que la reconstrucción económica se realizara en beneficio de los trabajadores urbanos y rurales atacando a fondo a los grandes pro· pietarios industriales, bancarios y agrarios. Los sentimientos nacionales exaltados en la guerra contra el invasor alemán se volvían ahora contra las fuerzas de ocu· pación angloamericana. 1

En resumen, se daba una serie de condiciones económicas, políticas, sociales y organizativas como para que el movimiento obre· ro y el conjunto de izquierda antifascista pasara a una estrategia de ofensiva rompiendo la línea de compromisos con la derecha antifascista, agente de las clases dominantes, movilizando a millones de trabajadores en la perspectiva de una democracia avanzada de fuerte cántenido socialista. En junio de 1945, bajo la presión del norte revolucionario, se forma un nuevo gobierno de coalición antifascista presidido por Parri, principal dirigente del partido de la Acción y presidente del Comité de Liberación Nacional de la Alta . Italia. Las posiciones del Partido de la Acción estaban a la izquier· da del PCI, en cuya dirección seguía predominando el espíritu conciliador de unión nacional del "viraje de Salerno". Quienes oponian fuertes resistencias dentro del partido a la política toggliatia· na eran considerados por la di· rección como "aventureros", "ul· traizquierdistas", y se decía que "no tenian en cuenta la relación de fuerzas". "En ningún docu· mento .coetáneo ni ulterior del POI -sefiala Claudin- puede encontrarse un verdadero análisis de esa relación de fuerzas; el supuesto de que no permitia una salida. socialista a la crisis del capitalismo italiano era manejado por la dirección del PCI como un principio metafísico, o un axioma matemático, a partir del cual toda la politica del partido quedaba justificada, asentada en una consideración rigurosa de la "situación objetiva". . . para la dirección togliattiana dicha "relación de fuerzas" dictaba el sometimiento a dos imperativos, cuya inobservacíón podia acarrear las mayores desgracias a la clase obrera y al partido: mantener la coalición con el ala burguesa del antifascismo y evitar todo conflic· to con los aliados. (Cada uno de estos imperativos implicaba forzosamente el otro: no era posible conservar la coalición con la derecha del antifascismo si se en· traba en conflicto con los aliados y a la inversa.) Desde el mamen'

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to en que se sujetaba a esas coordenadas el partido dejaba fa iniciativa en manos de la derecha, se condenaba a no ejercer más que una función de presión. Reclamaba, exigía, proponía, pero no . hacía nada por desplegar en la acción el potencial revolucionario del formidable movimiento obrero y popular que hervía en el pats". Un estado de parálisis se apode· ró de los partidos de izquierda; mientras se iban aplicando las medidas que aseguraban la supervivencia del capitalismo italia· no, las medidas revolucionarias quedaban solo en las resoluciones de los partidos o en la boca de sus dirigentes. La política del PCI, y de todos los partidos de izquierda, de aceptar como inevitable el curso reaccionario de la situación pivoteado por la dere· cha antifascista llevó a las fluctuantes capas medias a bascular hacia la derecha. En diciembre de 1945 la burguesía a la ofensiva provoca la caída del gobierno de Parri, que es reemplazado por De Gasperi, di· rigente conservador de la democracia cristiana. Este partido, que dos años antes era una de las fuerzas secundarias de la resis· tencia, lograba la hegemonía en la coalición de gobierno subordi· nando marcadamente a los partí· dos de izqüierda. A principios de 1946 todo el debate político se desplazó a un campo bastante tranquilizador para •la burguesia ita.liana: el problema de la abolición de la monarquia. Así, todos los partidos antifascistas, hegemonizados ideológicamente por la democracia cristiana, se pusieron tácitamente de acuerdo en reemplazar el peligroso debate "capi· talismo o socialismo" por el apacible y unificador "monarquía o república". En las elecciones para constituyentes de junio de 1945 ·se con· sagrará la hegemonía de la democracia cristiana; simultáneamente, el referéndum dará mayoría a la opción republicana. La democra· cia cristiana obtiene 8.000.000 de votos, el 35,2 % de fos sufragios emitidos, contra 4. 700 000 (20,8 %) del Partido Socialista y 4 300.000 (18,9 %) del Partido

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Comunista. Los votos comunistas y socialistas proventan en su gran mayoria del proletariado industrial y rural. La mayoria del campesinado y la pequeña burguesía urbana formaban el caudal de la democracia cristiana, aunque también votó a este partido un por· centaje de obreros que no veía diferencias importantes entre éste y los partidos obreros en lo refe· rente a los problemas sociales, pudiendo conciliar así sus senti· mientes religiosos. Para uno de los dirigentes comunistas "los demócratacristianos se presentaron a las elecciones con un programa social y de reformas de estrüctura que respondía a las as· piraciones de los trabajadores ca· tólicos y era sustancialmente idén· tico .al de los comunistas y socia· listas". Esto lo reconoció el mismo Togliatti, quien, después de las elecciones, señaló como causa del triunfo demócrata .cristiano el error que habían cometido socialistas y comunistas al no diferen· ciarse claramente de aquél. De Gasperi gobernó durante 18 meses con el apoyo, aunque a veces a regañadientes, de Togliatti y Nenni, que también formaban parte del gobierno . Las reformas de estructura quedaron aplaza. das, inmoladas en el altar de la acumulación capitalista . Las fuer· zas de izquierda, que reunidas su· maban el 40 % del electorado, se limitaron a un papel secunda· rio y no protagónico en la escena política, aunque por debajo la lu· cha seguía su curso agudizada por la crisis económica. Dice el historiador demócrata cristiano Vaussard: "En el fondo, mientras duró el tripartismo, Togliatti y Nenni, aun refunfuñando de vez en cuando, cedieron siempre ante el jefe de la D. C. Todo transcu· rre, en suma, como si desde el principio se hubiese réalizado una entente tácita entre los dos grandes partidos de masas (el PCI y la DC) a fin de que De Gasperi pudiera vencer las dos mayores dificultades que debla enfrentar después de la liberación: el voto del tratado de paz y de la nueva Constitución, la cual iba, en par· ticular, a ratificar o no los acuerdos de Letrán". De Gasperi obtu· vo de su propio partido y de los

Diarios clandestinos · publicados en /(alia durante la ocupación germana. Se calcula que unos mil periódicos aparecieron en la península incitando a la resistencia.

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. (',me ¡~ •• , . . _ Mi tnmpl lle ..,_... a!res, propuso for- los países coloniales, bajo las bantalecer la solidaridad revolucio- dera marxista-leninista, en aras naria con el pueblo del país ve- de la liberación nacional y social. cino, que también sufría la agre- Luego de haber fundado la Guesión japonesa. De este modo se rrilla Antijaponesa Kim 11 Sung formaría el frente conjunto anti- organizó y dirigió · los trabajos imperialista, con sus 1uerzas ar- tendientes al establecimiento de· madas propias. una base guerrillera, uno de los luego de la Conferencia los diri- importantes problemas estratégigentes centraron todos sus esfuer- cos en el desarrollo de la lucha zos en formar las guerrHlas. ,Se amada y en el aseguramiento de combinó estrechamente el trabajo la victoria de la revolución copara fundar la guerrilla con -el reana. avance revolucionario de las ma- Sobre la base de ·una considerasas populares. Dijo en esa opor- ción exhaustiva acerca de la cotunidad Kim 11 Sung: "Tenemos rrelación de fuerzas respecto del que levantarnos y luchar con las enemigo se decidió que la base armas en la mano. ¿Dónde con- guerriUera estuviera situada a lo seguiremos las armas? Podría- largo de las regiones litorales del

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río Qumangang, ·parte fronteriza norteña de Corea. A través de muchas batallas, li· bradas con el apoyo activo de las masas obreras y campesinas, la guerrilla fue estableciendo la base guerrillera mientras aplastaba a los enemigos que .actuaban para reprimir al pueblo. De esta ma. nera, en pocos meses se liberó una vasta zona del sistema, a lo largo de las orillas del río Dumangang, de la dominación enemiga. Una vez liberada esta zona se estableció allí el Gobierno Revolucionario Popular. Al respecto dijo el 1¡der coreano: "El gobierno que establecemos es un gobierno de nuestro pueblo, que no se .administra por un rey ni sirve para los intereses de los terratenientes, capitalistas ni de otros individuos, sino que lucha por el derecho, la felicidad, la libe.rtad y la independencia del pueblo, y este gobierno distribuye la tierra a los campesinos, concede a la mujer el mismo derecho que al hombre y permite a todos estudiar, trabajar y vivir bien". Este gobierno. estaba apoyado en un frente unido que abarcaba a todos los sectores antiimperialistas y antifeudales sobre la base de una alianza obrera-campesina y bajo la dirección de los comunistas. El Gobierno Revolucionario Popular fue establecido en la base guerrillera completa . Sus tareas inmediatas fueron las reformas democráticas, tales como confis· car las tierras a los imperialistas japoneses y los terratenientes projaponeses y distribuirlas gratuitamente a los campesinos; promulgar el sistema de jornada .de ocho horas; fijar un salario mínimo; abolir todo tipo de impuestos e implantar la igualdad de derechos del hombre y la mujer y el sistema de la enseñanza gratuita obli gatoria. De esta manera se .establecieron las nuevas relaciones socio-económicas y el orden revolucionario, libres de la explotación y la opresión. Esta base desempeñó un gran papel como fuerte base de reta· guardia que ofrecía ayuda material y humana a la guerrilla. Mientras la consolidaba convír-. tiéndola en poderoso baluarte de la revolución, Kim 11 Sung des-

La linea política fundamental del partido Inmediatamente después de la liberación, nuestro partido presentó como tarea política fundamental el construir sin demora una república popular democrática, para desarrollar y convertir a nuestra pa,tria en un estado soberano e independiente, rico y poderoso que garantice la felicidad, la. libertad y derechos del pueblo y se incorpore con iguales derechos a las filas de los países democráticos, en el escenario internacional. Para alcanzar este objetivo fundamental el partido fijó las siguientes tareas inmediatas: 1. Reunir las grandes fuerzas patrióticas y democráticas mediante la formación de un frente unido democrático nacional, que incluya a todos los partidos políticos y grupos patrióticos y democráticos, y sobre esta base esforzarse por el establecimiento de una república popular democrática que asegure la sober.anía e independencia completas de nuestra nación. 2. Liquidar enteramente las fuerzas restantes del imperialismo japonés, los serviles lacayos de la reacción internacional y todos los demás elementos reaccionarios, que constituyen los mayores obstáculos para la construcción de un país democrático, fa~ili­ tando con ello el desarrollo de nuestra nación por una vía democrática. 3. Con vistas al establecimiento de un gobierno provisional democrático unido de toda Corea, organizar antes que nada, en todas las localidades, los comités populares, genuino poder· del pueblo; efectuar todas las reformas democráticas; restaurar las fábricas y empresas y toda la economía nacional, destruidas por los imperialistas japoneses; y mejorar el nivel de vida material y cultural del pueblo y, de esta manera, echar los principales cimientos para la construcción de un estado democrático e independiente. 4. A fin de la realización de todas estas tareas, agrandar y fortalecer aún más al partido, impulsar enérgicamente el trabajo de las organizaciones sociales, encaminado a organizar las masas de todas las clases y capas unirlas en torno del partido. Inmediatamente después de la liberación, nuestro partido definió como línea política fundamental el establecer una sólida base democrática en Corea del Norte, realizando cabalmente las reformas democráticas y acelerando la construcción democrática en Corea del Norte, para emancipar completamente en el futuro a la nación coreana y convertir a Corea en un estado soberano e independiente, rico y poderoso. Kim Il Sung

La línea organizativa fundamental del partido "Desde los primeros días de su fundación, nuestro partido ha venido manteniendo la correcta línea organizativa para fortalecer sus filas tanto organizativa, como ideológicamente, asegurar su unidad ideológica y de voluntad y agrandar a sí mismo con rapidez." , "Nosotros debemos tomar un camino correcto del crecimiento del ' partido, para que ingresen en sus filas, principalmente los obreros y trabajadores avanzados de la ciudad y el campo ... "Si deseamos tener un partido comunista, influyente y prestigioso, debemos luchar sin falta y con toda energía para fortalecer la disciplina dentro del partido y mantener la unidad de éste ... "Si el partido se acerca siempre a las amplias masas trabajadoras y establece las relaciones estrechas con ellas, ese partido será invencible. Al contrario, si el partido se deja cautivar del buro~ cratismo apartándose de las masas, ese partido perderá el pulso y se arruinará ... "El partido no es una organización ordinaria sino una organización de forma suprema de la clase obrera y es también la que dirige todas otras· org.anizaciones de la clase obrera." Kim Il Sung

plegó una vigorosa lucha por im· pulsar la preparación organizativa e ideológica para la fundación del partido marxista-leninista. En setiembre de 1933 Kim 11 Sung libró la victoriosa batalla de la cabecera del distrito de Tungling en cooperación con las tropas antijaponesas. Esta batalla logró la ·Consol¡dación del frente conjunto anfümperialista. El fortalecimiento de este frente conjunto, así como su posterior desarrollo, constituyeron un im· portante golpe po.lítico y militar para los japoneses. Mientras propinaba golpes a los agresores el conductor coreano organizó y libró con diversos métodos el tra· bajo para desintegrar a los eneliligos desde adentro, aprovechando las contradicciones nacionales y clasistas en el seno del ejército enemigo. De este modo gran número de soldados del ejército de Manchuria se levantaron sucesivamente a través de insurrecciones mi.litares y pasaron a engrosar la guerrilla antijaponesa. Al mismo tiempo que realizaban un bloqueo político-económico y m~niobras contra la' base guerrillera los japoneses efectuaron, movilizando gran cantidad de fuerzas, la "táctica de limpieza", consistente en "quemarlo todo, matarlo todo y saquear.lo todo", y una operación de "asedio y ataque" encaminada a cercar la base y atacarla por largo tiempo. Ya en los primeros tiempos del establecimiento de la base los revolucionarios coreanos, previendo tales ataques del enemigo, forta· lecieron sin cesar la combatividad de ·la guerrHla y presentaron - la original idea de armar a todo el pueblo y fortificar la base, instalando un poderoso sistema de defensa. La estrategia y táctica aplicadas dieron resultado, y así los coreanos rechazaron aun con débiles armas a los enemigos, muchas veces superiores. Recordando aquella época dijo Kim 11 Sung: "Como aplicamos estas tácticas pudimos defender la base guerrillera entre cuatro y cinco años a 1pesar de .la ofensiva frenética de lo$ enemigos. Para entonces los malv.ados japoneses andaban solo por las carreteras anchas de los alrededores de la

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Escenas de la vida en Corea del No rte. Arriba, un grup~ de campesinas trabaja en la construcción de una zanja de riego. Abajo, una escuela de entrenamiento para enfermeras.

ciudad, pero en las aldeas no se atrevían a andar libremente ( ... ) Fueron únicamente los guerrilleros quienes llevaban fusiles y mosquetes. Los demás tenían lanzas o puñales y, en él mejor de los casos, algunas personas poseían escopetas. Pero como nos armamos todos .sin excepción, sea hombres, sea mujeres, aunque con tales armas, y luchamos valientemente de acuerdo con la justa táctica de guerrilla, pudimos mantener la base guerrillera durante cuatro o cinco años". En marzo de 1934 se organizó definitivamente el 'Ejército Revolucionario Popular· de Corea, reformando el sistema de la guerrilla antijapon~a con el fin de intensificar la llJCha armada. Por esa época se libraron muchas batanas, destacándose por su envergadura el ataque a las ciudades, ·Como el caso de Luozou. Paralelamente se fueron desarrollando las actividades de los trabajadores polfücos clandestinos, las huelgas obreras y una serie de conflictos entre terratenientes y campesinos. En el invierno de aquel año Kim •1 Sung, al frente de algunas unidades del Ejército Revolucionario Popular, marchó hasta llegar a Manchuria del Nc rte con el objeto de extender la influencia de la lucha armada. Mientras tanto, y para detener la creciente politización y acción de las masas, los japoneses organizaron el Minsengdan, entidad que nucleaba a los coreanos reaccionarios y cuyo fin era desorganizar desde dentro las filas revolucionarias. Los japoneses maniobraron, por medio de esta organización, para sembrar la discordia entre los coreanos y chinos y para hacer luchar entre sí a los coreanos. Grupos chauvinistas y fraccionalistas llevaron a cabo una política de hpo ultraizquierdista contra el Minsengdan, causando graves problemas a ;la lucha por la liberación nacional. Esta situación se tornó sumamente grave, tanto que no bien regresó de su expedición a Manchuria del Norte Kim 11 Sung convocó en la primavera de 1935 las cc;>nferencias de Dajongwe y Yo811gu, en el curso de las ct1ate5 centró con todo éxito sus 0

esfuerzos para destrozar las maniobras chauvinistas y fracciona.listas. Estos grupos miraban bajo la misma luz .las consignas revolucionarias del pueblo coreano por la liberación nacional y los lemas reaccionarios del Minsengdan, y negaban la misión nacional de la revolución contraponiendo el deber nacional de los comunistas coreanos a su deber internacional. De esta manera, ios citados grupos fueron desintegrados de la escena política gracias a la lucha abierta y de principios encarada en su contra. De acuerdo con la exigencia de la nueva situación creada y el desarrollo de la lucha armada, des· pués de la conferencia de Yoyongu, se disolvió de manera progresiva la base guerrillera fija -zona liberada- y se despacharon los destacamentos del ejército revo1uciona rio a extensas regiones de Corea y de Manchuria del norte y del sur, haciéndolos así pasar a la ofensiva activa contra :los japoneses. En estas zonas se libraron conse·cuentemente operaciones móviles en gran escala, .especialmente en las extensas regiones de los distritos de Ning-an y Omú como centro. En la segunda mitad de la década de 1939 Kim 11 Sung presentó una nueva orientación estratégica y tácti