Así se pinta con rotuladores [First edition] 8434205475

Table of contents :
PRÓLOGO, 7
I — INTRODUCCIÓN, 9
¡Rápido, un boceto!, 11
II — MATERIALES, 15
El papel, 17
Rotuladores a base de alcohol, 17
Rotuladores a base de agua, 18
¿Oué es un rotulador?, 18
La elección del rotulador, 20
Elegir los colores, 21
Blocs de papel dibujo, 22
Tabla de colores, 26
Documentación gráfica, 28
III — LA TÉCNICA, 31
Preliminares, antes del dibujo, 33
El dibujo de base, 34
El lápiz más adecuado, 35
Elementos complementarios, 36
El trazado o la aplicación del color, 36
Técnica de las paralelas, 36
Técnica del peinado, 39
Técnica del fundido, 41
IV — EL ACABADO, 45
Los detalles, 47
Procedimientos complementarios, 51
Trucos de oficio, 53
Realce, presentación y conservación, 56
Introducción a los ejercicios, 58
V — EJERCICIOS PRÁCTICOS, 59
Puente de Chatcu, 61
Castillo de los Pirineos, 67
Retrato de Alicia, 73
La casa de Louisiana, 79
VI — EL ROTULADOR Y LOS NIÑOS, 8
El rotulador en la escuela, 89
El rotulador en casa, 92
¿Alcohol o agua?, 92
El papel, 94
La técnica, 94
¿Qué dibujos colorear?, 95
El último paso, antes de la acuarela, 96

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ASI SE PINTA CON ROTULADORES CLAUDE DE SEYNES/TEAN NAUDET

(a Parramón ediciones. s.a.

ASI SE PINTA CON ROTULADORES

ISCUELA

DE

DIFFRO

DE INTERIORES Universidad de Guanatirte

103922

E Parramón Ediciones, S.A Primera edición, enero, 1936 Editado y distribuido por Parramón Ediciones, S.A. Lepanto, 264 4” 08013-Barcelona (España) Impreso en España por: SIRVEN GRAFIC, Gran Vía 754

08013-Barcelona (España) Depósito legal: B-2.209.36

N? Registro Editonal: 785 ISBN: 84-342-0547-5

cualquier otro sistema, sin permiso escrito del

o o

editor. Traducción: Marie-Anne Lecouté Adaptación al castellano: Eduard José . a?

El + y cs, es .

09

Prohibida la reproducción total o parcial de esta obra, mediante impresión, fotocopia, microfilm o

índice

PROLOGO, / 1— INTRODUCCION, 9 ¡Rápido, un boceta!, 11

II — MATERIALES, El papel, 1/7 Rotuladores Rotuladores ¿Oué es un La elección

15

a base de alcohol, 17 a base de agua, 18 rolulador?, 18 del rotulador, 20

Elegir los co.ores, 21 Blocs de papel dibujo, 22 Tabla de colores, 26

Documentación gráfica, 28 11 — LA TECNICA, 3* Preliminares, antos del dibujo, 33

El dibuja de base, 34 El lápiz más adecuado, 35 Elememos complementarios, 36

El trazaco o la aplicaciór: del color, 38 lécnica de las paralelas, 36

Técnica del peinado, 39 Técnica del tundido, 41

IV — EL ACABADO, 45 Los-dotalles, 47 Procedimientos complementarios, Trucos de oticio, b3

51

Realce, presentación y conservación, b6 Introducción a los ejerc:cios, 58 V — EJERCICIOS PRACTICOS, 59 Puente de Chatcu, 61 Castillo de los Pirineos. 67 Retrato de Alicia, 73

La casa de Louisiana, 79

VI — EL ROTULADOR Y LOS NIÑOS, 8 El rotulador en la escuela, 89El rotulador en casa, 92

¿Alcohol a agua?, 92 El papel, 94 la técruca, 94

¿Qué dibujos colorear?, 95 El último paso, antes de la acuarela, 96

prólogo «El trabajo intelectual. cuando es creativo, requiere una entrega total Afonunadamente, esta entrega no es prolongada; porque —como dio Payot—, el tempo del verdadero trabajo es Corto».

La frase anterior es del pensador y pedagogo francés Jean Guitton, quien en su libro «El trabajo intelectuab», y refiriéndose a la creatividad, afirma que ésta. aparte de ser una actitud, obliga a una concentración que, como todo trabajo intelectual, es intensa pero breve. El pensamiento de Jean Guitton es perfectamente aplicable al trabajo del artista y particularmente a la tarea del dibujante o del pintor cuando dibujan o pintan un apunte, un esbozo. Dibujar un apunte, que como tal ha de ser resuelto en un máximo de dos tres minutos, supone para el artista vivir unos momentos de angustia, de desasosiego, de emoción contenida —agradable emoción, por supuesto—, den-

tro de una concentración mental absoluta, captando y memorizando el modelo, comunicando a la mano y trasladando al papel a través de la visión y la retención, los contornos, los volúmenes, las formas que otrece el modelo. Pintar una nota o un apunte, es todavía más emocionante porque añade a todo lo dicho el reto del color, con su secuela de incógnitas e incertidumbres. Con razón decía Courbet: «Yo siempre pinto en estado de excitación». Pues, bien; esta angustia y emoción de crear, esta necesidad de dibujar y pintar al mismo tempo y de hacerlo sin detenerse, con un tiempo límite, crean-

do y coordinando formas y colores, es consustancial al dibujo y pintura con rotuladores: un procedimiento cuyas técnicas coinciden en muchos aspectos con la pintura a la acuarela. ASISE PINTA CON ROTULADORES ofrece al artista ilustrador y al grafista publicitario un contenido que a mí me parece imprescindible para tener éxito en estos campos del arte, Pero yo me permito afirmar, además, que las enseñanzas de este libro son también sugerentes, aleccionadoras

y, en

suma,

muy

interesantes para el aficionado y el profesional que pinta cuadros, paisajes, retratos, figura, bodegón: al óleo, a la acuarela, al pastel, etc. Porque el rotulador, usado con perfecto conocimiento de sus técnicas y posibilidades, constituye un medio ideal, pertecto, para proyectar, esbozar, pintar a tamaño reducido un estudio en color del cuadro definitivo. Existe a este respecto una idea equivocada sobre las posibilidades cromáticas de la pintura con rotuladores: se piensa que es un medio

infantil, que no ofrece una gama de colores versátil: de colores grises, quebrados, por ejemplo. Se piensa en rotuladores y se asocian a colores estridentes, fauves, amarillos, rojos, azules... Pues no: afortunadamente hay ahora un libro en el mercado, este libro, que demuestra con imágenes, con ejemplos, la

posibilidad de pintar con cualquier gama de colores, como pintando al óleo, a la acuarela, al pastel. Es cuestión de conocer el medio, los materiales, las técnicas, en una palabra: lo que explica y enseña este hibro

Claude de Seynes y Jean Naudet, los autores de ASI SE PINTA CON ROTULADORES, explican en este libro, específicamente, el arte de pintar con rotuladores; y subrayo la palabra «pintan», porque en las páginas siguientes el lector no encontrará enseñanzas circunscritas al arte de dibujar. Esta cualidad —saber dibujar— del artista, se le supone como el valor al soldado.

En fin, esta dedicación específica, sobre la pintura con rotuladores, creo que es beneficiosa desde el punto de vista didáctico y de especialización sobre el procedimiento, teniendo en cuenta que, tanto Claude de

Seynes con su magnífica resolución de ejemplos y demostraciones «paso a paso», como Jean Naudet con sus textos ordenados, claros, escritos realmente para enseñar, han rea-

lizado un trabajo que yo no dudo en calificar de extraordinariamente bueno.

Sincera y honradamente José M. Parramón — Director de lé colección “Aprender Haciendo” —

e

I — INTRODUCCION

INTRODUCCION

irápido, un boceto!

Año tras año, los profesionales de la ilustración asisten a una constante evolución de los maleriales que utilizan; unos

materiales estudiados y diseñados para simplificar su tra-

bajo cotidiano y mejorar su tarea creativa. Este libro trata

del rotulador como

procedi-

miento de dibujo, una técnica que podríamos calificar de revolucionaria, si atendemos a sus resultados y repercusión, La historia del rotulador empieza en la década de los sesenla.

Era lógico: tenía que llegar cl día en que una persona dota-

da de la necesaria rmenle analítica idease una pluma o pincel

capaces de contener la suficiente materia colorante en su interior, como para que el ilus lrador pudiese aplicarlo en cualquier lugar, sin tener que

recurrir constantemente a la paleta y a los frascos de pintura. En 1963, en Japón, aparece

el primer rotulador de punta tina. Era un rotulador específi co para la escritura. Un año

más tarde, nace lo que en Francia se llamó marcador (rotulador de punta ancha y bise-

aunoue dotado de una punta más sofisticada y con una gama de colores mucho más amplia. Como todo invento, el rotulador para dibujo no fue tan sólo

un hallazgo técnico, sino algo que respondía a una precisa necesidad de mercado —de un mercado muy especial, el de la publicidad—., Es gor ello que para conocer más delúu lles del uso de dicho instrumento deberemos analizar las diferentes etapas del proceso

publicitario, en el curso de las cuales suele intervenir cl rotulador como protagonista des tacado. : Esto, que puede parecer innecesario, a corto plazo nos será

de gran utilidad, ya que no hay nada más enriquecedor que seguir la paula marcada

por

los profesionales avezados a una técnica. Este lioro está basado en sus experiencias y sus enseñanzas responden a unas necesidades muy específicas

que desglosaremos más adelante. Luego, cuando haya asi milado usted las reglas de oro del procedimiento, será hora

de que desarrolle su propia creatividad sin trabas.

lada), concebido para “mar-

Esta fase de presentación del proyecto, de discusión entre

profesional y cliente, es inevitable. Por eso, el boceto es tan eficaz. ¿Cómo se realizaban esos

bocetos,

antes de que

surgiera el rotulador? Muy a menudo se presentaban hechos a lápiz, un procedimiento bastante pobretén—si me permite el calificativo , para escenificar un anuncio comercial que será a todo color y a buen seguro tendrá

un coste muy elevado. En otras ocasiones se recurría al gouache, un método bastante lento, ya que dichos colores tardan mucho en secar. ¿Qué ocurría entonces? Que muchas veces,

por esa precariedad de medics exhibida, el gratista perdía un posible cliente. Y he aquí que llega el rotulador, un instrumento que per

mitía la entrega del bocelo en un tiempo récord, casi “sobre la marcha”. No es raro, pues, que dicho procedimiento ganase adeptos, en detrimento del gouache y sobre todo entre

los dibujantes más jóvenes. Una

encuesta

realizada

en

1931, entre 6000 dibujantes y grafistas europeos, demostraba ese dato perfectamen-

¡Rápido, un boceto!

te. Los sistemas usados para

pronto se extendió a los des-

Cuando una agencia de publi-

pachos, para rotular sobre paquetes, sobres y paper-buard

¿idad, un taller de dibujo, o un

la realización de bocetos, eran Éstos:

(pizarras móviles de papel). No se le consideraba en absoluto un instrumento de dibujo y

nen a su cliente un proyecto publicitario —un anuncio, un

car” y trazar, cuyo

Uso muy

grafista independiente, propo-

solía presentarse en cuatro co-

tolleto o un cartel—, esa agencia, taller o grafista debe des-

lores: azul, rojo, verdey negro. Luego, tendríamos que aguardar hasta 1968, año en que nace el primer rotulador “de

.Cribir, esbozar lo que será la realización definitiva de dicho proyecto. Entonces se presenta un boceto, un croquis, un

dibujo”; no era sino el mismo

rough, como

instrumento ya mencionado,

Bretaña.

dicen en Gran

(Ilustradores menores de 35 años! el 52 % utilizaban el rotulador al 11% utilizaban el gouache (llustradores mayores de 40 años) el 38 % utilizaban el rotulador

el 22% utilizaban el govache 11

INTRODUCCION

irápido, un boceto!

Es a partir de 1981 cuando se desarrolla con mayor fuerza el uso del rotulador, hasta el

punto que algunos ilustradores se especializan en esa técnica. En Gran Bretaña se les

llamó roughmen; aquí, en España, se les conoce coma /ayoutmen. Y ya que estamos definiendo conceptos, veamos cómo concreta Georges Scellier—uno de los más tamosos roughmen-, las características de un buen profesional de su campo artístico: “El roughman es un hombre que tiene un pertecto dorninio del arte de manipular los rotuladores. Rápido como el relámpago, con un trabajo muchas veces anónimo, ejecuta su tarea en cantidad in-

gente y sólo trabaja por encargo”. Esta definición requiere que volvamos a insistir sobre algu-

nas de las cualidádes exigidas al laeyouiman: Rapidez

El rotulador es el instrumento ideal para bocetar una ilustración en color y rápidamente, Por varias razones: — su punta semirrigida permite cubrir grandes superficies y de manera uniforme. — se autoalimenta de tinta. — la linta seca con rapidez y ello permite superponer y yuxtaponer colores casi al instante, ya que éstos no se corren ni cambian de tonalidad con el tiempo. Dominio del trazo

Esa necesidad de rapidez cblige al layoutman a dibujar con buena técnica, puesto que se

ve precisado a situar sus personajes o elementos en el albujo, con tante más realismo cuanto el objetivo de su buceto es el de visualizar lo que será una foto posterior. Pero realismo no significa detallis-

mo. Me explico: convencer a un

Boceto reafizado con rotulador para una determinada marca de prodlucios alimenticios. En la página siguiente (abajo. izquierda), el mismo anuncio, tal y como se publicó en Jos medios publicitarios

INTRODUCCIÓN

cliente, aproximarse lo rmáximo posible a la realidad foto gráfica es interesante, pero con ello “prohibimos” al fotó-

grafo que actúe dentro de su campo campo

profesional lan

arlístico

un como

puede ser el del roughman, nolo olvidemos—. También se

corre el riesgo de que más tarde, el cliente no “encuentre” en la foto la minuciosidad descrila en el dibujo. Por eso, los fayoutmen se dividen en dos grandes grupos, o escuelas: los que prefieren un dibujo especificado hasta las últimas consecuencias, o los que

Otro caso semejanie al mencionado en ls página antenos: la hustración dle! pie (1). ejecuieda con rotulador, fue ubizada para realizar el anuncio 20merca! del que so muesira un fragmento bajo estas líneas (2),

INTRODUCCIÓN

irápido, un boceto! Ciaude de Seynes, co-gutor de este bro y experto roughiman, en su estuOvo de trobajs.

“sueltan” la mano y can cua-

poco

tro trazos “dicen” lo que pretendían.

Resumiendo, ur boceto no está pensado para perdurar. Digamos que las más de las

Conciencia

veces se deshecha,

de

la fragilidad

del rough o boceto Un boceto sirve para sugerir y convencer. Una vez acepta do, se entrega al fotógrafo —o al ilustrador, si el objetivo final es traducirlo en dibujo—, para que lo resuelva sin apartarse de la idea preconcebida. Cuando ese boceto regresa de dicho “viaje”, su estado es

14

menos

que deplorable.

lermina-

Ga la campaña pub'icitaria. Trabajar en el anonimato El layoutman trabaja para los

demás, por encargo. Se relaciona directamente con el responsable artístico que le pide un boceto. Tampoco firma su trabajo —no serviría de nada,

ya que ro será publicado—. Por contra, el resultado final, la fotografía, sí lleva la firma del profesional que ha ultimado esa idea del /ayouiman. Claude de Seynes, co autor de este libro, cs /eyoutman: torma parte de ese grupo de artistas modestos, pero llenos de talento, que hemos mencionado en este capítulo. hay que seguir sus pasos muy de cerca, para aprovechar sus ex periencias y adquirir el deseado dominio del rotulador.

1! — MATERIALES

MATERIALES

el papel

El papel

El papel, que para la gente en general es sólo papel, para el dibujante y artista se convierte poco menos que en un cola-

borador íntimo y muy querido. Y muy especialmente en la técnica del dibujo con rotulador, donde todo el talento del

dibujanie puede fracasar si no se tiene el papel adecuado. De ahí el desafío que se les presentó a los fabricantes de papel, obligados a crear un soporte especial que acepte la punta entintada del fieltro del rotulador, que sea un poco transparente y que absorba la tinta, pero no en demasía. La elección del papel para rotulador variará en función de los rotuladores que se pien sen utilizar, ya sean a base de agua, o de alcohol.

sobre el color, extenderlo y realizar degradados. — el modelo que calcamos [o

en el que nos inspiramos), debe ser visible a través del papel usado como soporte; es decir, que el papel no deberá ser totalmente opaco. — la tinta absorbida por la hoja sobre la que dibujamos, no debe manchar la hoja siguiente. Con este objetivo, los fabri cantes crearon un papel que dispone de una capa “aislante” protectora en su dorso. Estos papeles específicos para dibujo con rotulador, se venden en hojas sueltas, o bien en bloc, bajo diferentes denominaciones. La mayoría llevan una indicación parecida a és-

tas: marker”, “marqueur”, “feutre”, “lay-out” o “esquisse”. Los formatos son los siguientes: Al (210x297 mm). A3 [297 Xx 420 mm) y A2 (420

X594

mm!.

En algunos casos, este papel se vende tormando blocs, con varias pantallas de lelevisión impresas en el dorso de cada hoja. No hace falta ser muy listo para adivinar cuál es el uso a que van destinados esos blocs:

son

para

los

story-

boards (boceto de las escenas), de las películas o “spots”

Rotuladores a base de alco-

hol. Desde su aparición en el mercado, los fabricantes de papel tuvieron que idear un producto que respondiese a varias exigencias: — el rotulador debe resbalar y, por tanto, el papel ha de ser liso, sin grano, perleciamenite calandrado (presionado para que su-superficie sea más satinada). — la tinta aplicada por el rotulador no debe correrse sobre la superficie del papel; debe penetrar en él, pero quedanco lo bastante

fresca

como

para

tundirse con la tinta que se aplica de nuevo. Por tanto, el papel debe ser absorbente. la tinta ha de secar con rapidez (se trabaja rápido y a grandes trazos, no lo olvidemos), pero no demasiado deprisa, para que podamos “volver”

Blocs ds papel especia! para el dibujo

con rotulador. Se venden bajo mierentes rmercas y resultan muy cómodos

De eualquior forma, nuestro vendedor habitual nos informará deltupo de papel más idóneo.

17

MATERIALES

rotuladores a base de alcohol y agua

destinados a publicidad en TV, que se dibujan con rotulador, Mi consejo es que se deben hacer distintas pruebas con varios papeles, incluso con los que no son específicamente para rotulador. Nos haremos una idea de las virtudes e inconvenientes de unos y otros y apreciaremos la forma en que varía un mismo color en diferentes papeles. ¿Papel blanco... o de color?

Los arquitectos americanos que decidieron colorear sus di bujos con rotulador, descubricron un truco para colorear

directamente el tiraje de planos. Como es sabido, dicho tiraje, tras la insolación me-

diante papel díazo de un dibujo calcado, se realiza al vapor de amoníaco, siendo posible efectuar varios tirajes del mismo dibujo. Es decir, que se puede repetir una coloración poco satistactoria. Reve: lado a un ritmo normal, el tiraje produce un fondo blanco y

trazos rojizos, marrones o negros, según el papel utilizado, Pues bien, estos arquitectos, cuyos dibujos suelen ser muy estilizados y con una presenta ción que raras veces inlenta ser realista, utilizar las hojas mencionadas... como papel de color, mediante un truco muy sencillo: haciendo más rápido el tiraje del dibujo. Así, el amoníaco no tiene tiempo de quemar las zonas insoladas y deja un tinte uniforme (amarillomarrón ligero, rosa o gris), sobre la superficie de la hoja. Esto implica un ahorro de tiemnpo, en especial si el color del papel corresponde al color do-

minante que se pretende dar 18

al dibujo. Fs también un buen recurso, cuando sólo se quie"e colorear el centro de la ¡lustración —al estilo de un boceto inacabado, o cuando se busca un resultado similar al de las tres tintas —añadiendo en este caso tiza blanca sobre papel de color, Pero desengañémonos, para obtener una máxima orillantez y luminosidad del color de nuestros rotuladores, es preciso Usar papel blanco. Algunos dibujantes prefieren atenuar el brillo un poco crudo de los rotuladores, aplicando un gris pálido sobre determinados colores. Trabajar en papel blanco, nos hará descubrir mejor la gama de colores y sus postbilidades. Es la solución que hemos escogido para realizar los ejercicios propuestos como muestra. Rotuladores a base de agua. Son los más numerosos en el mercado y generalmente ván dirigidos alos niños. Más adelante presentaremos la realización de un boceto, con ayuda de dichos rotuladores. ¿Qué papel es el más adecuado para los rotuladores a base de agua? Bien, a primera vista se podría pensar que los papeles para acuarela, creados

para trabajar con agua, son los ideales. Pero no es así; esos papeles son granulados y la punta del rotulador no puede aplicar

correctamente

una

Iranja de tinta si la superficie del soporte no es lisa. Por tanto, el papel debe ser satinado, pero no del lipo couché, ya que éste lleva una capa de material que lo hace imper-

meable. Como hemos dicho, la esencia del dibujo con rotu lador está en cue la tinta penetre en el papel y seque más o menos rápidamente.

Pero cuidado: el agua de la tinta no se evapora tan aprisa como el alcohol y puede ondular el soporte al secarse. Por fortuna, los fabricantes crearon hace tiempo un papel "es pecial”” para rotulador, utilizable a la vez para los rotulaciores de agua y de alcohol, ¿Qué es un rotulador? Lo dijimos anles: el rotulador es un invento japonés de principios de los años 60. Ello no puede sorprendernos; los japoneses escriben con pinceles y el rotulador, de alguna manera, con su punta semirrígida, es consecuencia de la evolución del pincel. Lo más correcto sería llamarle pluma de fieltro, ya que tiene un depósito, igual que algunos pinccles japoneses. En sus inicios, el rotulador se utilizó comercialmente para escribir. Al surgir los modelos de varios colores, sus aplicaciones fueron ampliadas; por ejemplo, se usaba para la es-

critura sobre superficies brillantes (cuadros, paneles de celulosa), o para el realce de algunos textos (con el famoso textliner fluorescente). La última variación sufrida por el rotulador en su estructura física es el cambio de la punta rígida por otra de flexible, en torma de pincel, de la que haolarermos más adelante. Tratemos ahora de conocer mejor los rotuladores, sus elementos complementarios y los grandes rotuladores de cabe-

MATERIALES

¿qué es un rotulador? fzouierda]

Suseñale satinada

.

«

L

. o

LL.

”

-

5 2

A ”

EDREAL

Capa absorbente

bel

»

PR

-

=

A

Capa impermeable

¡

Corte transversal de una

hoje de papel especia! para rotulador Lacapasuperores sensada; el núcloo centrales absorbente y la capa inferior es impermuabie. (Abajo; Corte transversa! de un rotulador, con su Caguchóon.

L—

za ancha, capaces de cubrir amplias superficies y de realizar con ellos importantes com-

de! rotulador tiene un conjun to de microagujeros que llevan la tinta hacia su extremo.

binaciones de colores.

La punta Al emplear la palabra feft-tio pen, es decir “pluma con punta de fieltro”, los ingleses cometen un error, ya que hace mucho tiempo que las puntas de los rotuladores han dejado de ser de fieltro, materia demasiado frágil y blanda. Al principio, dicha punta era de balsa, madera tropical muy emplicada por los fabricantes de maquetas a pequeña escala; la balsa es una madera ro-

sistente, por la especial orien-

tación de sus fibras. Más tarde, las puntas se hicieron de plástico. Ahora, son de película de poliester compensado —o de cualquier otra materia sintética parecida, según sea el fabri-

El depósito y la tinta Al contrario de una pluma estilegráfica normal, en el depósito del rotulador existe un me-

chón de fieltro impregnado de tinta que conduce a ésta —por medio de la capilaridad—, hacia la punta del utensilio. To davía es posible encontrar algunos viejos rotuladores con el depósito a la vista, donde se aprecia ese fieltro. En un párrafo anterior ya hemos distinguido los rotula-

dores a base de agua y los de

alcohol (en realidad, ese supuesto alcohol no es sino x1Heno, un compuesto químico muy parecido). En apartados subsiguientes comentaremos otras peculiaridades de cada tipo de rotulador.

cante—. Un rotulador es capaz de trazar una raya de... 11.640 metros!

Por fin, digamos que la punta

Las tintas a base de alcohol Como es lógico, estas tintas tienen tendencia a evapcrarCapuchón

Mecha, empepada de tinta

Depósito

19

MATERIALES

elección del rotulador

se. Por eso, debe taparse el rotulador una vez se haya usado. Fsta recomendación es

tanto más importante, cuanto mayor sea el tamaño del rotulador y de su punta. Algunos labricantes aseguran que sus

productos pueden durar hasta cuatro años; otros, dan diez años de vida a sus rotuladores

y los más audaces alcanzan el

rrados y alejados de cualquier fuente de calor. La elección Incluso en el usemos casi res de punta

del rotulador supuesto de que siempre rotuladofina, deberemos

>E =

EN

en la necesidad de conservar el rotulador o la plumarotulador cuidadosamente ce-

ULA

decenio con sus previsiones. No entraremos en discusiones. Nos limitaremos a insistir